La línea de vida
¿Has oído hablar de la línea de vida?
Es una técnica que utilizamos en psicología para ayudar a nuestros pacientes a conocerse mejor.
Se trata de una recapitulación de acontecimientos, vivencias experiencias que te ayudarán a entender tu propia historia.
Es importante destacar que la línea de vida no sirve para juzgar o arrepentirnos de nuestras decisiones. Sirve para comprender por qué tomamos un camino concreto en un momento dado y qué rumbo queremos seguir de ahora en adelante.
¿Cómo realizarla?
La línea de vida (dibujarla te ayudará a visualizar mejor) es una representación de tu historia, desde que naciste hasta la actualidad. En ella has de situar, cronológicamente, momentos importantes por los que has pasado, cambios relevantes, experiencias, historias que te hayan marcado. E incluso puedes incluir proyecciones de futuro.
Coge papel y boli y dibuja una línea recta. El inicio de esa línea será el momento de tu nacimiento.
Marca también el momento actual.
A partir de ahí echa la vista atrás y ordena, cronológicamente, momentos importantes en tu vida (nacimientos, bodas, fallecimientos…).
Marca también momentos que han significado un cambio en tu vida (final de tus estudios, inicio de tu vida profesional, un viaje…).
Has de señalar también momentos que han significado un punto de inflexión en tu vida, tanto para bien como para mal.
Y a partir del punto que has marcado como el actual, intenta hacer una proyección de futuro, de cómo crees que será tu vida a partir de ahora.
Análisis
Una vez hayas descrito todo lo anterior deberás tomarte tu tiempo para analizar y reflexionar esos momentos que has marcado como importantes, lo que significaron para ti y cómo los afrontaste.
También servirán para analizar y gestionar las diferentes emociones asociadas a cada momento, y también las que no hemos gestionado de manera consciente.
Con esta técnica, podremos entender varias cosas:
La visión que tenemos de la vida.
Nuestras prioridades.
Qué recuerdos conservamos de la infancia y cómo han podido influir en el presente.
Cuántos cambios hemos realizado a lo largo del tiempo y cuáles han sido sus características.
Cómo vivimos en la actualidad y cómo nos planteamos el futuro.
Y tal y como hemos destacado anteriormente, esta técnica no sirve para juzgar lo que hemos hecho a lo largo de nuestra vida. Sirve para conocer o comprender las razones por las que hemos ido en una dirección y qué rumbo queremos seguir de ahora en adelante.
Related Posts
Atiquifobia o miedo al fracaso
Es algo más común de lo que nos pensamos y la mayoría de las personas lo han...
¿Qué son las ganancias secundarias en psicología?
¿Has oído hablar de ganancias secundarias en psicología? Es uno de los...